Él y yo, dos locos
viviendo una aventura castigada por Dios, un laberinto sin salida donde el
miedo se convierte en amor. Él y yo, sólo nos vemos a escondidas para
ahogar esta prohibida pasión, y aunque tengo
dueño, él solo tiene un sueño, ser mi protector. Él y yo, teníamos claro
que era una locura esta relación, pero la carne nos llamaba y la cama nos
hacía una invitación a solo hacer el amor.
Un lugar para tratar de tocar el cielo con los pies en la tierra. Así que si estás preparado para exigir respuestas, prepárate también para escuchar verdades.
lunes, 21 de octubre de 2013
domingo, 20 de octubre de 2013
Platón.
El cuerpo humano es el carruaje; el yo, el hombre que lo conduce; el
pensamiento son las riendas, y los sentimientos los caballos.
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